Cada suspiro que de mi pecho nace parece un soplo de esperanza; como el vaivén de la hojarasca cuando la mece el aire.
Y vienes a mí porque así te siento, casi latente en mi ser como divina ambrosía como ritual de amantes.
Como quien ama con la intensidad misma de la hoguera; que de aquella pasión nace como paloma que lleva en su pico una rosa roja antes de desojarse.
Después cierro los ojos y me dispongo a so~arte había ente Tú y Yo una brillante luna, que más que verme me invitaba a amarte.
En fín... cada suspiro perfumes en el aire un viento arrecia... un mar se agota... las nubes pasan, yo sigo aquí entre mís madrigales.
Y vienes a mí porque así te siento, casi latente en mi ser como divina ambrosía como ritual de amantes.
Como quien ama con la intensidad misma de la hoguera; que de aquella pasión nace como paloma que lleva en su pico una rosa roja antes de desojarse.
Después cierro los ojos y me dispongo a so~arte había ente Tú y Yo una brillante luna, que más que verme me invitaba a amarte.
En fín... cada suspiro perfumes en el aire un viento arrecia... un mar se agota... las nubes pasan, yo sigo aquí entre mís madrigales.