viernes, 23 de mayo de 2014

MUJER

Quién gozara mujer
de tu belleza,
y de tu místico encanto
que enamora
que comparo mujer
a tu nobleza
con la tenue fragancia
de las rosas.

Quién pudiera ser tu
de piel y alma, 
alcatráz de deseos
y venturas,
regocijo de miles
de aventuras
más la calma del mar
en su bravura.

Y mirarse en el cielo
de tus ojos
y robarle a tu boca
un mar de besos,
y tu risa gozar
con embeleso
cada noche
cuándo sale la luna.

Quién pudiera
ser templo de pasiones
la dulzura de aquél
que te acaricia,
dibujar en los labios
la sonrisa
a pesar de sentir
mil emociones.

Quién pudiera mujer
ser como niña,
y alegrar con su risa
cristalina
el comienzo de un fín
que se avecina
el otoño...
donde mueren las rosas.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Entrada destacada

AUTORRETRATO

Hablemos claro... yo no soy una sombra; soy un alma, con cuerpo y con memoria. Un destino en un mundo inalcanzable; la geog...